porque el espacio en el papel nunca es suficiente...
las RECOMENDACIONES de la
RUTA SONORA
oct 14 a 20
*THE WHO: LA ESTRIDENCIA DESAFIANTE
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* KNOT FEST
* BALKAN FEST
* MUTEK (I)
* WOLFMOTHER
Pete Townshend // foto: Fernando Aceves |
Con sus afamados giros de brazo, cual manecillas que dictaran con
puntualidad británica que la hora de estremecer al público mexicano por primera vez en su historia había
llegado, el Maestro Pete Townshend (como lo llamó al final
del concierto con gran respeto, cariño y reverencia su compañero de viaje, el
cantante Roger Daltrey) al frente
del combo seminal de rock inglés The Who,
la noche del miércoles 12 en un Palacio de los Deportes a reventar, dio cátedra
magistral de lo que el rock puede llegar a ser en uno de sus momentos más
altos, al mismo nivel inventivo de The
Beatles, a la misma altura majestuosa de los Rolling Stones, de la misma talla que los viajes cósmicos de Pink Floyd, con los ingredientes
aditivos del estruendo y la “destrucción” como catarsis creativa y disruptiva,
la suntuosidad sinfónica y la irreverencia cuestionadora.
Para sorpresa de muchos que vaticinaban ruptura senil de huesos o
desempeños decadentes, los sobrevivientes de este monstruo musical se mostraron
impecables, enteros: Daltrey con la voz aún potente y clara, Townshend aporreando una y otra vez la guitarra, dando uno que otro leve saltito, o aventándose su famosa deslizada sobre las rodillas, que aunque no fue perfecta y se fue de bruces hasta rodar por el suelo, arrancó ovaciones y lágrimas de tan entusiasta a sus 72 años de edad. Sabido es que Pete suele tener muy mal humor, sin embargo, el público mexicano estaba tan entregado y fuera de sí que aquél no dejó de sonreír una y otra vez. Aun así, acostumbrado uno a escuchar incesantemente los viejos discos del Quién, era inevitable extrañar los
exagerados y enloquecidos redobles sincopados del gran Keith Moon así como la corrección enérgica de John Enwistle, a pesar de ser bien cubiertos por Zak Starkey, hijo de Ringo Starr, y por Pino Palladino respectivamente, quienes lejos de imitar a
aquéllos, prestan sus habilidades a la causa fundamental de The Who: romper
tímpanos y prejuicios.
Roger Daltrey al frente; Townshend a la derecha. Atrás, Zak Starkey // foto: Toni Francois |
Tras una cálida y bella sesión a voz y guitarra, a cargo del hermano de
Pete, Simon Townshend como acto
abridor (bienvenido por unos, repudiado por muchos impacientes), la felicidad
se vio transfigurada en dos horas de éxtasis y perfección sonora, en las que la
explosión de la guitarra de Townshend y el cuidadoso detalle de sus pasajes
expansivos, escuchados milagrosamente bien en un foro donde usualmente todo se oye mal, se convirtieron en el centro de
atención: el autor, ideólogo y demiurgo de toda esta idea musical estaba ahí,
frente a nuestros ojos; el mismísimo, por primera vez para muchos. Qué
conmovedor, qué fuerte, es tener ante uno a la historia misma, sonando de forma tan prístina y clara. Tener enfrente al personaje orgulloso que no ha dejado caer sus obras
cumbres, y no ha dejado de revitalizarlas, estremeciendo pieles y mentes; al
genio que sin autocomplacencia se reta a sí mismo y a la audiencia, al armar
para conciertos masivos sus temas más complejos, tales como los de sus
óperas-rock Quadrophenia (1973) y Tommy (1969), siendo este último pasaje el
que generó antier en vivo mayor deslumbre, estupefacción y embeleso, sin más
discursos que la elocuencia de la composición tremenda, tanto musical como
lírica.
52 años han pasado desde el día en que Pete rompió contra el techo del
Hotel Railway su Rickenbacker,
primero como un accidente, después como un símbolo que lo acompañaría para
siempre y lo haría sentir invencible, según sus propias palabras. Dice en sus
memorias Who I am (2012): “Algunos tomaron tal destrucción como un ardid
publicitario, pero yo sabía que el mundo estaba cambiando y que estábamos
mandando un mensaje: la forma convencional de hacer música ya nunca iba a ser
la misma”. Y sí. El miércoles quedó demostrado en directo que la música de Townshend,
su furia sobre las seis cuerdas y el trémolo, sigue siendo poderosa y rompe-madres 50 años después, y a la vez
inquebrantable: no ha podido ser igualada; si acaso ha sido imitada y fue un punto de
inspiración para miles (entre otros, fuente clave para el punk inglés de los años 70).
La dupla fantástica // foto: Toni Francois |
Con un repertorio inmejorable, entre videos e imágenes de sus años mozos
con el logo redondo, azul, blanco y rojo de la banda, así como coordinadas
explosiones de luces que estallaban a la par de las entradas triunfantes de las
múltiples Stratocasters del
guitarrista de marras, y la voz de Daltrey en alto, imbatible, con todo y sus
usuales bailecitos arrítmicos, The Who dio vuelo a los temas más selectos de su
discografía: Tommy (Amazing Journey,
Pinball Wizard, See Me Feel Me, Sparks, The Acid Queen) y Quadrophenia
(5:15, I’m One, Love Reign O’er Me, The
Rock) dominaron la escena, seguidos por las más explosivas y conocidas
canciones de esa joya emblemática llamada Who’s Next , de 1971 (Baba O’Riley, Bargain, Behind Blue Eyes, Won’t Get Fooled Again); la más progresiva Who are you, sin dejar atrás sus clásicos mod como I can’t explain, My
Generation, I can see for miles, The Kids are Alright y una que otra pieza
de discos con menos relumbre, pero no menos buenas, como You better you bet, Join together, Eminence front.
Además de pasajes curiosos como la recomendación en
pantallas de no fumar porque le causa alergia a Daltrey y “en su lugar, mejor
comer pastelitos mágicos”, y el deslizamiento entrañablemente fallido de Townshend, quedan en la memoria grabadas con cincel, la agitación, la belleza, la
conmoción, la ternura, la exaltación, que la música atemporal, inalcanzable, de una banda
como The Who es capaz de generar, y aun más en vivo. Qué bueno que al menos estos dos no murieron antes de envejecer. Infinitamente tardío, pero
histórico concierto el del día 12, sin duda, para las gloriosas memorias de los
escenarios mexicanos.
FITO PÁEZ. JUNIOR BOYS DJ SET. NOCHE ELECTRÓNICA MÉXICO-ALEMANIA. NON STOP SKA FEST. GEPE. LOS SECRETOS. SOTOMAYOR. SON DE MADERA + SONEX. LOS LICUADORAS + XIMBO.
VIERNES 14
Fito Páez |
1. Fito Paez en espectáculo íntimo, más que cercano, en el que serán sólo él y su piano en escena. Lunario del Auditorio Nacional. 20 horas, $1050 a $1500.
Monolake |
2. Tras un encendido concierto el jueves en Lunario, el dueto canadiense Junior Boys seleccionará la música (DJ set) en Imperial (Álvaro Obregón 293, Condesa). 22 horas, $150.
3. Noche electrónica alemana-mexicana, presentada por el Instituto Goethe: el fantástico dueto Monolake, desde Berlín; también: Electric Indigo, Aerea Negrot, Skinnerbox y Los Niños. Ex Fábrica de Hielo (Gutiérrez Nájera, esquina con La Viga, colonia Tránsito). 20 horas, $250. Detalles: http://www.alemania-mexico.com/eventos/noche-electronica-alemana-mexicana-2016/
Big Mandrake |
SÁBADO 15
Slayer |
1. Sábado 15 y Domingo 16. Knotfest. Afamado festival de metal, punk, hardcore y géneros afines, organizado por la banda estadounidense Slipknot, que mezcla música con motivos circenses. Elenco flamboyante, internacional y nacional: Avenged Sevenfold, Slayer, Deftones, Marilyn Manson, Ministry, The Offspring, Disturbed, Meshuggah, Opeth, Arch Enemy, Chevelle, Sevendust, Hatebreed, Devil Driver, Carcass, Alesana, Attila, entre otros. Foro Pegaso (Toluca, Estado de México). De las 13 horas a la medianoche, cada día. Entradas por día: $1650; abono por los 2 días: $3000 en www.superboletos.com. Precios VIP, mapa y demás detalles: http://knotfestmexico.com/
The Skatalites |
2. Más y más y más ska. Festival gigante Non Stop Music Festival, con lo mejor del ska internacional y nacional: The Skatalites, The Selecter, Inspector, Mad Caddies, Voodoo Glow Skulls, The Toasters, Skarnales, Los de Abajo, Tijuana No, King Hammond, La Tremenda Korte, Royal Club, Sekta Core, Capone, Los Aguas Aguas, Karamelo Santo, entre otros. Detalles: http://www.ocesa.com.mx/evento/non-stop-ska-music-festival/
Palacio de los Deportes (Churubusco y Añil). 12 horas (mediodía), $255 a $600.
Gepe |
3. El chileno Gepe (Daniel Riveros) y su pop buena-ondita, altamente adorado por el público indie mexicano, sigue presentando su disco Estilo Libre (2015). El Plaza (Juan Escutia 4, Condesa). 20 horas, $400 a $665.
Los Secretos |
4. Todo un clásico del rock-pop español, proveniente de los años de oro ochentero, esto es, de la llamada Movida Madrileña: Los Secretos. Muy recomendable. Lunario del Auditorio Nacional. 21 horas, $690 y $1150.
Sotomayor |
6. Rock-pop amistoso, para darle calor al cuerpo: Niños Héroes, La Dolorosa y Emisario. Pasagüero (Motolinia 33, Centro). 22 horas, $50.
Son de Madera |
7. Son jarocho actualizado y sabrosón con Son de Madera y Sonex. Nuevo Foro Hilvana (Puente de Alvarado 17, Buenavista; cerca del metro Hidalgo). 20 horas, $150.
Los Licuadoras |
8. Segunda eliminatoria del Primer Concurso de Bandas Emergentes de la CDMX. Bandas invitadas: Ximbo y Los Licuadoras. Centro Cultural Venustiano Carranza (Lázaro Pavia s/n, al lado de la explanada delegacional Venustiano Carranza; Jardín Balbuena: para mayor referencia, es en la esquina que hacen Fray Servando Teresa de Mier y Francisco del Paso y Troncoso). 13 horas, entrada libre (las bandas invitadas tocan de 18 a 20 horas).
DOMINGO 16
Emir Kusturica & No Smoking Orchestra |
Balkan Fest con la presencia estelar del cineasta y músico serbio Emir Kusturica y su No Smoking Orchestra. También: Disco Balkan, EurHopa! Orkestar; de México: la Banda Regional Mixe. Pabellón Cuervo del Palacio de los Deportes. 18 horas, $665.
MÁS ADELANTE, LOS EVENTOS RESTANTES.
Por su comprensión, gracias